Es fácil confundir diablillos y demonios. Ambos son criaturas con cuernos con caras feas, garras afiladas y una inclinación general por llevar a las personas por caminos peligrosos. Sin embargo, hay algunas diferencias notables entre las dos criaturas.
Los diablillos son hacedores de travesuras, mientras que los demonios son malhechores. Los diablillos tienen sus orígenes en el folclore germánico primitivo, mientras que los demonios aparecen en la religión. Algunos pueden considerar al diablillo una especie de demonio, pero nunca al revés.
Siga leyendo para obtener una explicación más detallada de las diferencias entre diablillos y demonios. Destacaré los orígenes, la apariencia, los poderes y las personalidades de ambas criaturas.
Diferencia de diablillo y demonio
Si solo tienes un conocimiento pasajero de diablillos y demonios, puedes mezclarlos fácilmente. Sepa, sin embargo, que no siempre son intercambiables.
A continuación se muestra una tabla que resume las diferencias entre diablillos y demonios.
Diablillo
Demonio
Origen
precristianismo; folklore germánico
Según la teología cristiana, son ángeles caídos.
Apariencia
Pequeño, delgado y feo
Varios tamaños; rostro horriblemente monstruoso
Potestades
cambio de forma; si sirve como familiar de una bruja, puede hacer cualquier cosa que una bruja requiera
Posesión demoníaca; llevando al hombre al mal y a la tentación
Personalidad
Travieso, pero no siempre malvado.
Pura maldad; incapaz de comprender el bien
Tenga en cuenta que solo voy a hablar sobre diablillos y demonios tal como los define el folclore europeo y la religión occidental. No voy a hablar de criaturas orientales parecidas a demonios como los oni japoneses , que, si bien son adversarios constantes de los humanos, no siempre se consideran "malvadas" en el sentido occidental. Profundicemos más en los orígenes, la apariencia, los poderes y las personalidades de los diablillos y los demonios.
Los diablillos tienen sus raíces en el folclore germánico. Su nombre proviene de la antigua palabra inglesa "ympa", que significa "vástago de un árbol". De eso, puedes inferir que los diablillos casi siempre tienen un ser más poderoso que los controla.
Por otro lado, la palabra “demonio” proviene de la palabra griega “daimon”. “Daimon” era un término general para una criatura divina dotada de sabiduría y no tenía una connotación negativa. Con el tiempo, “demonio” describió a los seres que se rebelaron contra el Dios cristiano y existieron para conducir a los hombres al mal.