Uriel es un reconocido arcángel en la tradición rabínica y algunas corrientes del cristianismo. Aunque puede que no sea tan famoso como Miguel, Rafael y Gabriel, es uno de los ángeles más estudiados por la angiología. Su nombre, que significa «Dios es mi luz», lo representa con un libro o pergamino en una mano y un enorme sol en la otra.
La presencia de Uriel en los textos sagrados
Aunque el nombre de Uriel no aparece en la Biblia, su nombre se menciona con frecuencia en los libros apócrifos. Según se dice, hizo apariciones destacadas en los textos sagrados de judíos y cristianos, incluso sin tener su nombre explícitamente mencionado.
Se cuenta que Uriel estuvo presente en el Jardín del Edén, donde protegió la entrada con su espada de fuego. También participó en el entierro de Adán y Eva, la primera pareja humana creada por Dios. En el Libro de Enoc, el ángel se le apareció a Noé para advertirle del diluvio que se avecinaba.
Asimismo, en el Libro del Éxodo se supone que Uriel estaba presente durante la plaga más terrible que golpeó a Egipto. Se dice que la figura celestial pasó por delante de las casas para ver qué puertas estaban pintadas con la sangre de cordero, siguiendo así la guía de Dios. Esta plaga acabó con la vida de los primogénitos de aquellos que no cumplieron con esta instrucción, incluyendo al hijo del poderoso faraón.
De acuerdo a los evangelios apócrifos, Uriel habría ayudado a proteger a Juan el Bautista cuando aún era un bebé, evitando la orden de Herodes de exterminar a todos los niños nacidos en ese momento.
La reverencia hacia Uriel
Múltiples corrientes del cristianismo reverencian a Uriel, considerándolo un arcángel importante. Sin embargo, en el año 745, la Iglesia Católica intentó limitar la devoción hacia las figuras angélicas y solo se permitió la reverencia hacia los tres grandes arcángeles: Rafael, Miguel y Gabriel. En la Iglesia Anglicana de Inglaterra, Uriel perdió estatus y solo los mencionados arcángeles son reverenciados.
Según algunas tradiciones, Uriel fue elevado al estatus de santo. Es conocido como el gobernante del sol y, por lo tanto, a veces se le llama «la llama de Dios». También se le conoce como el arcángel de la sabiduría, creyendo que puede ayudar a las personas a encontrar sabiduría para resolver problemas y alcanzar sus metas.
La influencia de los seres celestiales
Esto hace de Uriel una de las figuras angelicales más importantes para aquellos que creen en la poderosa influencia de estos seres celestiales. Su estudio y devoción han dejado una huella significativa en diferentes corrientes religiosas y en la mitología en general.
A continuación, se muestra un resumen de la información presentada en este artículo:
Arcángel | Uriel |
---|---|
Significado del Nombre | Dios es mi luz |
Representación | Un libro o pergamino y un sol |
Presencia en los Textos Sagrados | Apariciones en libros apócrifos, protección en el Jardín del Edén, participación en el entierro de Adán y Eva, advertencia a Noé sobre el diluvio, presencia en la plaga egipcia, protección de Juan el Bautista |
Reverencia | Rendida por varias corrientes del cristianismo, limitada en la Iglesia Católica y solo reverenciado en la Iglesia Anglicana de Inglaterra |
Atributos | Gobernante del sol, arcángel de la sabiduría |
Preguntas frecuentes sobre Uriel
¿Cuál es el significado del nombre Uriel?
El nombre Uriel significa «Dios es mi luz».
¿Cuál es la representación visual más común de Uriel?
Uriel es representado con un libro o pergamino en una mano y un sol en la otra.
¿Cuál es la importancia de Uriel en la tradición religiosa?
Uriel es considerado uno de los arcángeles más importantes debido a su presencia en diversos eventos sagrados y supuestas apariciones en textos apócrifos.
Espero que hayas disfrutado de este artículo sobre el arcángel Uriel y su significado en la mitología religiosa. Si estás interesado en aprender más sobre figuras angelicales y su influencia, te invito a revisar nuestros artículos relacionados en rincondelmito.com.
¡Hasta la próxima!
¡Hola! Soy Alex, un apasionado de la mitología que ha dedicado gran parte de su vida a estudiar y explorar distintas culturas y sus mitos. Desde joven, me sentí atraído por historias de dioses, héroes y criaturas fantásticas que alimentaban mi imaginación y curiosidad. Con el tiempo, desarrollé un amor especial por la mitología nórdica y egipcia, aunque siempre he estado ávido de descubrir otras tradiciones.