La vida sexual de los reyes y reinas ingleses ha sido objeto de escrutinio y escándalo durante siglos. Solo el periodo de los Tudor presenta un abanico de relatos, desde el cortejo sexualizado de Enrique VIII hasta el de su hija, la Reina Virgen Isabel I. Las relaciones extramatrimoniales en la corte británica eran aceptadas o incluso fomentadas por algunos monarcas, pero eran severamente castigadas por otros.
Jacobo I: El Rey Escandaloso
Comenzamos la lista con el rey Jacobo I, hijo de la Reina María Estuardo. Su corte se asociaba con el libertinaje y estaba llena de hombres encantadores, actores y sirvientes a los que el rey colmaba de besos y probablemente más. A lo largo de su vida, Jacobo mantuvo estrechas relaciones con cortesanos masculinos, lo que ha provocado un debate entre los historiadores sobre su sexualidad.
Enrique VIII: El Rey de los Amores y Desamores
Los amoríos y matrimonios de Enrique VIII son bien conocidos. Sin embargo, si hubo un rey que lo superó en cuanto a escándalos amorosos, ese fue Carlos II. Conocido como el «monarca alegre», Carlos llevó la diversión y el placer a la corte. Se rumorea que incluso contrajo una enfermedad de transmisión sexual, lo que llevó al médico Condón a diseñar un preservativo en su honor.
Jorge III: La Virtud en el Trono
A diferencia de los reyes anteriores y posteriores, el reinado de Jorge III y su corte fueron muy pacíficos. El rey predicaba el fomento de la piedad y la virtud, y trataba de prevenir y castigar los vicios. Sin embargo, las cosas eran muy diferentes con su hijo, Jorge IV. Este rey era un reflejo de sus intereses, llevando una vida extravagante llena de mujeres y gastos excesivos.
Victoria: Una Reina Apasionada
La época victoriana fue conocida por la represión sexual y el pudor, especialmente de las mujeres. Sin embargo, la propia Reina Victoria era un poco más abierta sobre su apetito sexual. Escribió sobre su primera noche con el príncipe Alberto después de su matrimonio, compartiendo la misma cama y acostándose juntos en la oscuridad. La reina Victoria vivió una vida sexual plena y tuvo nueve hijos a pesar de no disfrutar estar embarazada.
Eduardo VII: El Rey de los Escándalos
Los días de Eduardo VII estaban llenos de fiestas, hermosas mujeres, buena comida, carreras de caballos, juegos de cartas y apuestas. Era considerado un playboy y tuvo varias amantes a lo largo de su vida. A pesar de su comportamiento hedonista, destacó en los acuerdos diplomáticos durante su breve reinado.
Rey/Reina | Vida Privada | Escándalos |
---|---|---|
Jacobo I | Relaciones estrechas con cortesanos masculinos | Debate sobre su sexualidad |
Enrique VIII | Matrimonios y amantes conocidos | Problemas conyugales y divorcios |
Jorge III | Promovió la piedad y la virtud | Relativamente pacífico |
Victoria | Apetito sexual abierto y nueve hijos | Contrario a la represión sexual de la época |
Eduardo VII | Fiestas, mujeres y escándalos | Conocido como el «rey de los escándalos» |
Preguntas frecuentes:
¿Qué monarca inglés tuvo más amantes?
Aunque todos los monarcas mencionados tuvieron sus propias aventuras amorosas, Carlos II puede llevarse el título de tener más amantes e hijos ilegítimos.
¿Qué rey fue conocido por su represión sexual?
Jorge III fue famoso por predicar la piedad y la virtud, y tratar de prevenir y castigar los vicios en su corte.
¿Cuál fue el rey que llevó la diversión y el placer a la corte?
Carlos II, conocido como el «monarca alegre», fue quien llevó la diversión y el placer a la corte. Su vida estaba llena de fiestas y disfrute.
Es fascinante adentrarse en la vida privada de los reyes y reinas ingleses a lo largo de la historia. Sus preferencias íntimas y las formas en que las vivieron siguen siendo objeto de investigación y especulación. Si te ha interesado este artículo, te animo a que sigas explorando el apasionante mundo de la historia y la mitología en los artículos relacionados de nuestro blog.
¡Hasta la próxima!
¡Hola! Soy Alex, un apasionado de la mitología que ha dedicado gran parte de su vida a estudiar y explorar distintas culturas y sus mitos. Desde joven, me sentí atraído por historias de dioses, héroes y criaturas fantásticas que alimentaban mi imaginación y curiosidad. Con el tiempo, desarrollé un amor especial por la mitología nórdica y egipcia, aunque siempre he estado ávido de descubrir otras tradiciones.